Desde que la Feria de Mayo se trasladase a su actual recinto de Vistazul, se ha ubicado siempre en el mismo sitio, al comienzo de la zona de atracciones. Es la Noria Infantil, la atracción bandera de la familia Castán, que se jubila tras más de 30 años de historia.
Así lo cuenta su actual propietario, Hipólito Castán, que recuerda desde que era un niño a sus padres con esta atracción en la Feria de Dos Hermanas. Y es que la Noria Infantil es la atracción con la que esta familia de feriantes lleva tiempo, a pesar de haber tenido puestos de algodón o un tiovivo.
Con una altura de más de tres metros, la noria cuenta con ocho barcas o cunitas con capacidad máxima para cuatro niños y niñas, a partir de 18 meses.
Un paseo en esta noria tiene un coste, comenta Hipólito, de tres euros, y el pequeño puede estar cuatro o cinco minutos dando vueltas en esta atracción.
A punto de dejar de venir
Hipólito Castán asegura que la evolución de la feria en estas tres décadas ha sido como la de su gente. Destacando el gran bache vivido hace ocho o nueve años, en plena crisis, cuando se planteó dejar de venir a la feria. La situación parece que ha mejorado y ahora no faltan niños y niñas para subirse a la Noria Infantil.
Se va a modernizar
Tras más de tres décadas ofreciendo diversión a los pequeños nazarenos y nazarenas en su feria, dejará de prestar servicio. “Las atracciones van prosperando con el paso de los años y ésta se ha quedado anticuada”.
Y eso, a pesar de que, con el paso de los tiempos, han sido varios los arreglos y mejoras que se le han practicado, sobre todo por motivos de seguridad.
Para la próxima Feria de Mayo, la de 2020, la idea es que la familia Castán esté en Dos Hermanas con una nueva feria infantil, que ya ha sido encargada para su ejecución.
La idea, comenta Hipólito, es que “las cunitas sean más grandes para, de esta forma, satisfacer las peticiones de las familias, a las que les gustaría poder subirse con sus hijos en la atracción”. Eso será el año que viene.