EIBAR ( Pais Vasco ). La pirotecnia tendrá normativa.
Ante la gran cantidad de petardos que estallaron en Nochevieja, desde el Ayuntamiento consideran «preciso» llevar a cabo una regulación en la ley
Eibar no fue ajeno al estallido de petardos y cohetes los días de Nochebuena y Nochevieja. Durante la madrugada se oyeron en la zona de Urki y Txantxa Zelai, junto a otros puntos, la explosión de muchos de ellos. No se registraron incidentes ni hubo detenciones por la utilización de los molestos petardos, «pero en Eibar es en las fiestas de San Juan y Nochevieja cuando más se utilizan estos artilugios», según fuentes de la Policía Municipal.
No obstante, en Eibar no existe una normativa local que regule su uso, y únicamente se aplica la ordenanza del Gobierno Vasco. En vista de la situación, el alcalde, Miguel de los Toyos, comunica «el traslado a la asesoría jurídica municipal la necesidad de analizar en profundidad y, en su caso, adaptar la regulación del uso de petardos y otro material pirotécnico en Eibar, a fin de garantizar los intereses y la necesidad de equilibrio en la convivencia».
Con esta iniciativa se pretende exigir que las referidas actividades estén sujetas a las disposiciones de sus respectivas regulaciones, y como consecuencia de ello, a la posible sanción por las infracciones cometidas.
Su objetivo no se encuentra tanto en plasmar una mera advertencia, sino en constituir un llamamiento a la prudencia y al respeto hacia los demás, ya que en un alto número de ocasiones los afectados por esas indebidas actuaciones no son sus propios actores, sino personas ajenas cuyos bienes, e incluso vidas, son puestos inconscientemente en peligro. «En Eibar tenemos un parque de viviendas antiguo y cualquier día puede pasar una desgracia, como ha pasado en otros sitios. Por ello, es preciso llevar a cabo una regulación», apuntaba De los Toyos.
En otros municipios de la provincia se establecen normativas en las que se califica como pirotecnia las bengalas de toda clase, las sorpresas japonesas, fulminantes, tubos silbadores, cohetes voladores, volcanes, cohetes diversos, petardos…
Asimismo, se estipulan una serie de sanciones para los establecimientos de venta de petardos que no cumplan la legislación vigente. Estas sanciones pueden alcanzar los 3.000 euros de multa, e incluso, el cierre del establecimiento.
Con la normativa se establece la prohibición de su empleo o lanzamiento desde balcones o ventanas de pisos y viviendas, así como en locales cerrados o donde haya concurrencia de personas, así como la venta y utilización a menores de 18, 16 y 12 años, según la categoría.
Proyecto de tienda
El año pasado, una empresa solicitó licencia municipal para la apertura en el barrio de Amaña de una tienda para la venta de este tipo de productos. De inmediato los vecinos de los pisos superiores a la tienda se negaron a que se otorgara la licencia respectiva y solicitaron amparo al Ayuntamiento.
Tras una reunión de la Comisión de Gobierno municipal, se descartó conceder licencia a la franquicia, que tenía ya alquilado un local para la venta de piroctenia y otros elementos similares.