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 La gran labor social que realizan a diario  los feriantes.

La gran labor social que realizan a diario los feriantes.

La gran labor social que realizan a diario los feriantes, que nadie conoce o no quieren recordar.

La feria no tiene edad, todos quieren experimentar y estar inmersos por la alegría y felicidad

La gran labor social que proporciona a diario los feriantes con sus atracciones, pero que nunca se habla de ello, por desconocimiento, por no recordarlo o porque tienen otra imagen de la feria o de los feriantes.

Hay una frase que siempre me ha gustado, utilizo con frecuencia la cual he procurado enseñarla a mis hijos “ si haces algo y no lo dices o comunicas a los demás, es como sino lo hubieras hecho”.

Los feriantes tiene una gran responsabilidad social frente a la sociedad, la cual cumplen a diario, pero al no decirse y comunicarlo a los demás, especialmente a los medios de comunicación, es como si no lo hicieran. Las cosas positivas que se realizan al no comunicarse, las noticias que llegan a los lectores suelen ser en la mayoría de veces negativas, ya que por desgracia esta comprobado y los periodistas lo saben por experiencia, que las noticias negativas venden más que las positivas. Pienso que la labor de cambiar esta mala costumbre está en manos de todos los que están de una forma directa o indirecta en el sector para conseguirlo.

Como muestra de lo que digo, hace unos días salió la triste noticia de la explosión de un oleoducto aquí en España, habiendo que lamentar dos muertos. Esto en los periódicos nacionales fue noticia de uno o dos días. Sin embargo cuando sucede algún accidente en la feria, la noticia va rodando por los periódicos semanas y meses.

Esta actitud no es buena para el sector, por lo que es importante hacer vera los periodistas que las noticias negativas que están comunicando tan constantemente no es bueno para nadie, malo para la feria porque supone poner a los cliente en guardia, ocasionando miedo, repulsa y pérdidas económicas durante un tiempo a todo el sector y malo a los periodistas por querer ahondar en una herida que no siempre es como se cuenta en los titulares, afectándoles en su caso en su reputación profesional.

El propio feriante es quien nos contagia de esos valores tan importantes de felicidad.

Me consta y pienso que quien esté leyendo estas líneas tiene claro que los primeros que no desean que haya un accidente en la feria son los propios feriantes, por eso todos los días y como si fuera una obsesión, trabajan muy duro todos los días que hay feria como los días que no la hay, revisando todas las atracciones, su mecánica y que la seguridad de las mismas nunca falle, como de la misma forma lo hacen en los hinchables para evitar esas desagradables situaciones.

Los feriantes desde hace un tiempo están luchando para que el Ministerio de Cultura les vuelva a considerar como una Actividad Cultural, hecho que beneficiaria a Feriantes y a todos los usuarios de las atracciones. Casualmente hasta 2011 estaban considerados como tal pero por una decisión unilateral y sin fundamento del Ministerio, se les quito esta consideración al considerar que los feriantes no tenían en esos momentos representatividad. Desde hace tiempo los feriantes han solucionado esa carencia que se les solicitaban, por lo que automáticamente el Ministerio de Cultura les debería de devolver ese nombramiento que tenían como actividad Cultural. Mientras tanto ellos no cejaran de luchar por conseguir lo que solicitan y saben que les pertenece, al solucionar en lo que se aferraba Cultura a la hora de quitar esa consideración.

LA GRAN LABOR SOCIAL DE LOS FERIANTES

Como preámbulo a este título diré que la risa permite a los que la experimentan alivio y alegría. También ayuda a sentirnos más ligeros y a contagiar a otros esa sensación positiva. 

Reír nos hace bien de muchas maneras. Nos ayuda a ejercitar los músculos del rostro, liberar tensiones, restarle importancia a aquello que nos produce malestar, ver el mundo con otra óptica, recargar energías, conectar con nosotros mismos y con otros, y mucho más.

La felicidad, el mayor antídoto contra cualquier enfermedad.

La alegría como valor se manifiesta desde el interior, del alma, se refleja a través de sensaciones de bienestar. La alegría es un sentimiento positivo causado por una emoción placentera o por la proximidad con alguna persona o cosa que exterioriza este tipo de emoción y la transmite hacia las demás personas.

De igual manera aunque los feriantes tengan sus propios problemas y después de casi dos años sin tener trabajo e ingresos, cuando están en su trabajo como buenos profesionales, son los primeros que trasmiten alegría a todos los que ven.

Los feriantes no paran ni un minuto para que sus atracciones funcionen bien y sean seguras.

En consecuencia hay que decir que los feriantes están proporcionando a la Sociedad esa alegría, positivismo y risas que la Humanidad, a través de los tiempos, siempre a perseguido y es de las situaciones más buscadas y más valoradas. Si esto lo traspasamos a los niños o más pequeños, está labor que posibilita el ir a la feria de atracciones, está ocasionando en ellos que desde muy pequeños puedan vivir y experimentar esta situación y que de paso les pueda alejar durante este tiempo de las preocupaciones y situaciones complicadas de esta vida. Los niños al ser felices en la feria, transmiten y hacen partícipes de esta situación a los más mayores, a las persona que los acompañan y los que tiene a su alrededor.

¿ hay algo mas bonito que ver felices a nuestros hijos ?

Si fueran mas honestos los y Políticos de todos los Estados del planeta y con la misma ansia que tienen por recaudar dinero, buscaran lo mejor para los ciudadanos, las fichas para subir a los atracciones o cacharritos no solo se deberían en las taquillas de las mismas, sino que serian prescritos por los médicos, psicólogos y psiquiatras de la Seguridad Social y los venderían en las farmacias, ya que la risa, vivir situaciones de felicidad y alegría está comprobado que ayuda a combatir muchas enfermedades, pero como estas fichas no las fabrican los grandes laboratorios y las farmacéuticas esto no va a poder ser posible de momento.

Las risas son contagiosas

De la misma manera y por esa regla de tres, los Ayuntamientos y Diputaciones, lejos de cobrar unas tasa tan elevadas por la ocupación del suelo, para instalar las atracciones, buscaran lo mejor para los Ciudadanos deberían pagar para que fueran muchos feriantes que acudieran a las ferias o fiestas locales para contagiar la alegría a sus ciudadanos y más ahora que estamos saliendo de una pandemia y entrando en una crisis económica, en que la gente busca alegría y reírse mucho para poder desconectar momentáneamente de los problemas que diariamente nos acechan.

ser feliz junto al amor son dos de las virtudes más importante.

Todo ello es por lo que a los más jóvenes de la casa, a los adultos y padres siempre les atraerá ir a la feria, ya que solo con entrar dentro de sus recintos o zonas acotadas al respecto y escuchar la música, ver moverse las atracciones, verse rodeados de gente que se siente feliz y se ríe, nos contagia un estado de felicidad y alegría que como decíamos anteriormente es una virtud que siempre a perseguido la humanidad ¿ a que visto desde este punto de vista la feria nos es cara y sí necesaria ? Si la gente fuera más a la feria, proporcionalmente no iría tanto al médico o a las farmacias.

La gente al entrar en los recitos feriales, experimentan un cambio muy positivo.

Con todo ello y para ser justos, deseo de todo corazón aportando mi granito de arena en favor de que esta información llegue a la mayor gente posible, para que todo el mundo comience a cambiar un poco la imagen de los feriantes. En esta ocasión no pongo ninguna publicidad de mis oficinas ni de lo que hacemos ya que hoy el protagonista es el Feriante y la Feria.

Salvador F. Tarazona Baixauli Corredor de Seguros.

Más vale una imagen que cien palabras.

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