Los feriantes rechazan montar las atracciones en las fiestas de León y acusan al alcalde de «racismo»

La falta de acuerdo entre Ayuntamiento y feriantes pone en jaque la instalación de atracciones en las Fiestas de San Juan y San Pedro.

La falta de acuerdo tras cinco reuniones entre la asociación y el Ayuntamiento rompe las negociaciones | «Si la feria no se hace es por ellos. En otras ciudades nos están rebajando o quitando la tasa y aquí se niegan» | El Consistorio no cederá y el canon seguirá siendo el acordado en 2017

«Este año no se monta la feria. No se quieren hacer cargo de nada, el recinto está muy mal. No se va a poder montar ninguna atracción este año».

Así de contundente ha sido el presidente de la Asociación de Feriantes de León, Pedro Arroyo, tras mantener la quinta reunión con el Ayuntamiento de León y no alcanzar ningún acuerdo para explotar el recinto ferial.

Decepción entre el colectivo al rechazar el gobierno municipal incluso acondicionar la instalación anexa al estadio Reino de León. «Los trenzados los tienen que poner ellos y nos dicen que los paguemos nosotros. Los baños da vergüenza entrar en ellos. Si hay una tormenta fuerte se inunda y si entra el agua en una atracción va a causar un problema serio».

Rebaja de la tasa

Y es que, insisten, a pesar de que la intención de los feriantes era montar, la falta de facilidades que les está dando el Ayuntamiento «nos hace ver que son ellos los que no quieren que haya atracciones».

El contexto económico que vive el sector ha llevado a otras ciudades a abaratar los costes. En Valladolid, se les rebajó el 40%; en Oviedo, el 30%; en Ponferrada, el 50%; y en La Bañeza no les cobraron por instalar las atracciones. «Aquí nos cobran 32.000 euros solo por ocupar el terreno. A ello tenemos que sumar la limpieza, el agua, la luz, la UVI móvil, la ambulancia…».

El Ayuntamiento no bajará la tasa

El Ayuntamiento de León, a través de las concejalías de Hacienda y Fiestas, ha mantenido distintas reuniones y conversaciones con los feriantes con el objetivo de «facilitar la celebración de la feria» durante las Fiestas de San Juan y San Pedro. Según afirman fuentes municipales, En estas conversaciones se determinaron «una serie de mejoras para garantizar la mejor situación de las atracciones, así como establecer medidas para atraer al mayor número de personas al recinto ferial con actividades paralelas o iluminación».

De las mismas negociaciones, parte de los feriantes eran partidarios de no establecerse durante las ferias si no se eliminaba el canon de concesión demanial establecido en el año 2017. «Ante la imposibilidad de eliminar o reducir este canon, el Ayuntamiento, con el fin de colaborar con los feriantes, propuso derivar alguna actuación musical a la feria para que sirva para atraer visitantes, iluminar una parte del recinto, abordar determinados gastos que el ayuntamiento podría asumir para reducir los costes para los feriantes y realizar otro tipo de pequeñas mejoras en el área anexo al campo de fútbol».

El Ayuntamiento garantizará las mejores condiciones posibles para la Feria pero es imposible que, tal y como solicitan algunos feriantes se exonere del pago del canon legalmente fijado y aceptado por ellos.

El precio que supondría a la asociación instalar la Feria de San Juan y San Pedro ascendería a 110.000 euros, algo que las 110 familias que acuden a estas fiestas de León no pueden asumir.

Acusación de racismo

También lamentan que en todos los días que tenían previsto montar sus atracciones -del 22 de junio al 3 de julio- la Concejalía de Fiestas, con un presupuesto de 800.000 euros este año, no haya llevado a este entorno alguna de las 60 actuaciones musicales previstas.

Por todo ello, Arroyo no tiene dudas de que tanto el alcalde de León, José Antonio Diez, como la concejala Evelia Fernández «son racistas» y ese es el principal motivo de todas las complicaciones que están encontrando los feriantes en la capital leonesa. «Pagamos mucho, traemos beneficio a León. Somos una empresa más, contratamos servicios en León y comemos en León. No entiendo que nos hagan esto».

La última oferta, según afirma la asociación, en la que se comprometían a pagar el canon y 18.000 euros extra, a cambio de que fuera el consistorio quien sufragara los gastos, tampoco recibió la aprobación del concejal de Hacienda.

Con esta situación, los feriantes insisten en que las negociaciones «están rotas», que el recinto se quedará vacío en este 2022 y que los leoneses no podrán volverse a subir a las atracciones tras estos dos años de pandemia.

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