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La caída de público obliga a los feriantes a bajar un 50% el precio de las atracciones

La caída de público obliga a los feriantes a bajar un 50% el precio de las atracciones

Los organizadores de La Semanona dicen que la asistencia se redujo un 80%, ya que «la asocian con la Semana Negra», que concluyó el domingo

Las atracciones, de la noria al Ratón Vacilón, cuestan ahora dos euros. El lunes, los feriantes cerraron antes por la ausencia de público. / JUAN CARLOS TUERO

La organización de La Semanona ha consensuado la reducción de un 50% en el precio de la totalidad de las atracciones. Superado el ecuador de esta cita, la Asociación de Industriales Feriantes de Asturias (Asinfeas) considera que esta medida facilitará que el público se anime a seguir acudiendo a la feria, porque «muchos creen que ya se acabó, que solo duró una semana».

La explicación, muy sencilla, la da Javier Rodríguez, presidente de Asinfeas: «La gente nos asocia a la Semana Negra y como acabó el pasado domingo, desde el lunes notamos un descenso de hasta el 80% de público».

Así, cada una de los atracciones tiene desde el martes un coste de dos euros, la mitad de la tarifa que rigió durante la primera semana. «En el inicio, fue bastante bien de gente y nos animó mucho porque después de un año tan malo, esto ayuda a ir saliendo», apunta Rodríguez. Pero luego se torció. «Siempre se nos ha asociado a la Semana Negra y hay quienes piensan que terminamos cuando acaba la feria literaria».

El público, analiza la organización, es sobre todo gijonés: «Hay menos familias y los adolescentes son los más asiduos»

Ahora, no solo se trata de anunciar que la cita prosigue hasta el próximo domingo, día 25, sino que se busca incentivar la vuelta del público. «Decidimos bajar los precios porque lo que queremos es que la gente venga y hay que facilitarlo, ya que la venta desde el lunes ha ido fatal».

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«Cerramos una hora antes»

Como prueba, el lunes, al no tener casi público, los feriantes decidieron cerrar una hora antes de lo permitido. «Nadie venía, era absurdo seguir».

La Semanona abrió sus puertas el pasado 9 de julio en terrenos de Naval Gijón, con todo tipo de medidas de seguridad para poder acercarse sin riesgo a algunas de las 37 atracciones que se ofrecen: obligatoriedad de mascarilla, toma de temperatura y gel hidroalcohólico. Una rutina necesaria para el disfrute seguro.

La primera jornada, en la que la meteorología fue una aliada, acogió a un buen número de asistentes, algo que se repitió durante los primeros días. «La gente lo cogió con ganas», recuerda Rodríguez. Unas ganas nacidas de un año en blanco tanto para los feriantes y como para los amantes de sus atracciones. El Ratón Vacilón es uno de los principales reclamos, junto a los clásicos hinchables y atracciones que no fallan como el Saltamontes. También el Speed, «porque hacía más de dos años que no se traía y a la gente le gusta mucho». Una de las novedades es la atracción Adrenaline, «que está teniendo una acogida enorme porque produce sensaciones fuertes».

En cuanto al público, según los organizadores es fundamentalmente gijonés. «No notamos mucha gente de fuera, son un público muy lineal», reflexiona. Incluso, dice, los hay que «vienen todos los días».

La ausencia de puestos de comida se traduce en una menor presencia de familias, porque «estas siempre quieren darse una vuelta y tomarse algo, quizás sin montarse en nada». Así es que «los adolescentes han sido los más asiduos». Rodríguez quiere ser positivo y asegura que «se cubrirán gastos, pese a todo». De momento, y una vez que la Semanona finalice, los feriantes tienen entre manos un proyecto en Avilés.

Enlace para acceder a la noticia original en el periódico El Comercio La caída de público obliga a los feriantes a bajar un 50% el precio de las atracciones | El Comercio

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