Aunque consideran que es una buena noticia porque empiezan a trabajar, las nuevas condiciones no benefician a estos empresarios que llevan meses con la caja a cero. La capacidad máxima al 50% y el máximo de 10 niños por grupo significa que necesitarán más personal, algo inviable en las condiciones en las que se encuentran.
LAS RESTRICCIONES LO PONEN DIFÍCIL
La presidenta de la Asociación de Parques infantiles de Mallorca, Mercedes Marín, asegura que seguirán luchando: quieren conseguir aumentar a 15 el grupo de niños y al 30% del aforo como en otros sectores muy parecidos a ellos. De momento, empezarán a funcionar durante 15 días.
Mercedes tiene un local de unos 800 metros cuadrados y paga por él cerca de 4.000 euros al mes. Lamenta que los propietarios de los locales no hayan tenido en cuenta la situación del sector y siga cobrando lo mismo que antes a la pandemia. Recuerda Mercedes que antes de cerrar sus negocios, hace ya ocho meses, eran 35 en la Asociación. Hoy son 22 y teme por su futuro.
LOS FERIANTES TAMBIÉN VUELVEN A LA ACTIVIDAD
A partir de este sábado los parques de Mallorca podrán reabrir y también se podrán volver a organizar ferias. El Govern permitirá el acceso a las áreas recreativas y la organización de ferias en las mismas condiciones que los mercados y el horario de apertura será entre las 19.00 y las 21.00 horas. Los ayuntamientos deberán asegurar la presencia de los dispositivos y las medidas de prevención adecuadas para evitar que se formen aglomeraciones.
Se trata de una noticia que acogen de manera agridulce los feriantes, ya que ocho meses después podrán reactivar su actividad, peor lo tendrán que hacer de manera muy limitada. Podrán montar tres atracciones por cada plaza o calle y el siguiente grupo de tres tendrá que estar a una distancia de 25 metros. Esto implicará que mucha gente no pueda trabajar.
El presidente de la Asociación de feriantes de Baleares, Javier Barranco, entiende que hay una pandemia pero sienten que hay otros sectores, que no están al aire libre, que cuentan con medidas más suaves.
Esta situación será a largo plazo y están especialmente preocupados ya que hasta 55 familias de Baleares dependen de este sector. Esto significa que el padre, la madre y los hijos trabajan en el negocio y no tienen opción a cobrar. Una situación caótica ya que tampoco pueden vender sus atracciones por la falta de compradores. Muchos han decidido vender sus propiedades.
Enlace para acceder a la noticia original. : Empresarios de parques infantiles y feriantes: “Nos dejan abrir para que nos callemos” – Mallorca – COPE