Cartagena. Las obras del Plan Rambla obligan a mover terrenos                                                    contra reloj para reubicar la feria

El retraso del nuevo vial, que construye Tomás Olivo, fuerza a vallarlo y colocar las atracciones más cerca del campamento

Los terrenos situado frente al Estadio Cartagonova vivirán, en los próximos quince días, un frenesí aún mayor de obras, para acondicionarlos de cara a Carthagineses y Romanos. El retraso en la ejecución del nuevo vial que conectará la calle Soldado Rosique con el entorno del Palacio de Deportes obligará a vallar esta carretera, para evitar accidentes, y cambiar de ubicación la feria instalada cada mes de septiembre con motivo de las fiestas históricas. Este año, las atracciones estarán más cerca del campamento de tropas y legiones, en concreto frente a la calle carthaginesa, lo que implica acondicionar de inmediato suelos anexos a los que cede cada año el constructor Tomás Olivo.

En medio de la inquietud de los feriantes, que temían perder espacio para 40 de sus 90 puestos, representantes de este gremio, del Ayuntamiento de Cartagena, de la Federación de Tropas y Legiones y de la empresa Emasa -la compañía de Tomás Olivo encargada de la urbanización de la zona- mantuvieron una reunión en la zona. En ella, técnicos del Consistorio y delegados de la Federación, entidad organizadora de las fiestas, garantizaron a los empresarios que en la finca elegida hay una superficie similar a la de años anteriores, por lo que podrá instalarse el mismo número de feriantes que el año pasado, y que esta semana, a ser posible a partir de hoy, entrarán apisonadoras y camiones con grava.

Las obras de modernización de la Avenida del Cantón, que deben estar acabadas el 31 de octubre de 2020 para cumplir con el convenio de urbanización del Plan Rambla, empezaron en febrero. Después de dieciocho años de interrupción, el acuerdo entre el Ayuntamiento y Emasa reactivó los trabajos, incluidos en un proyecto que llevará a Tomás Olivo a levantar al menos 1.692 pisos entre el campo de fútbol, el barrio de La Concepción y Sebastián Feringán.

El Gobierno local, que gestiona este asunto a través de las concejalías de Urbanismo y Festejos, cuyos responsables son los ediles socialistas Ana Belén Castejón y Juan Pedro Torralba respectivamente-, no facilitó información sobre el estado de las obras que impulsa en esta zona de expansión de la ciudad y sobre las medidas relativas a las fiestas. El presidente de la Federación, José Antonio Meca, sí que confirmó a ‘La Verdad’ que las distintas partes alcanzaron un acuerdo que aportar soluciones a las cuestiones técnicas planteadas de cara a las fiestas, que tendrán lugar desde el viernes 20 al domingo 29 de septiembre.

Meca indicó que el Ayuntamiento pondrá vallas alrededor de las obras que está realizando Emasa, «para que no haya percances» y esté garantiza la seguridad de viandantes y vehículos. Añadió que, al no poder ser ocupada ya, con fines de ocio, el área que los feriantes han utilizado durante años, es decir a uno y otro lado del antiguo trazado de la Avenida del Cantón, se hizo necesario buscar una alternativa.

Tras analizar la situación, y a fin de que los feriantes tuvieran una cantidad de metros cuadrados suficientes para mantener el número de atracciones de 2018, la opción elegida fue una parcela situada en un lateral del campamento festero. Se trata de un espacio de tierra que, según indicó Meca, no plantea un problema especial de inundabilidad en comparación con el resto del sector, y además será preparado con maquinaria para evitar grandes desniveles, como se ha hecho todos los años días antes de los festejos.

El máximo responsable de las Fiestas indicó que todas las partes cuentan con el hecho de que, debido a su cercanía a la rambla de Benipila, el conjunto del Plan Rambla «es inundable», pero hizo hincapié en que la reubicación de la feria no añade ningún riesgo. Tanto en las ediciones anteriores, como en la de este 2019, las autoridades exigirán los mismos requisitos de prevención. Además, este y otros aspectos forman parte de un plan específico, que aprueba todos los años la Junta Local de Seguridad.

De este órgano de coordinación entre el Ayuntamiento, la Comunidad Autónoma y la Delegación del Gobierno forma parte la Policía Local, que este miércoles estuvo presente en la inspección.

«Estábamos preocupados»

José Antonio Meca envió un mensaje de tranquilidad a vecinos, festeros y empresarios, y precisó que el 90% de los feriantes que el año pasado se instalaron ya han hecho sus reservas para esta edición. Comentó que el plazo de recogida de inscripciones acaba hoy y transmitió su «agradecimiento a todas las partes implicadas, por sus facilidades para sacar la mejor feria a la calle: Emasa, Ayuntamiento, feriantes y Federación».
El presidente de la asociación local de feriantes, Gabriel Cervera, aplaudió el interés mostrado por los festeros para solucionar el problema suscitado por el retraso en las obras del vial y mostró su confianza en que todo esté listo para empezar el montaje el día 13, justo una semana antes del arranque de Carthagineses y Romanos.
«La verdad es que estábamos preocupados, porque nos dijeron que teníamos que cambiarnos de sitio y, hasta esta mañana, había 40 familias que podían quedarse sin trabajo por falta de sitio para instalar sus atracciones», reconoció a este diario Cervera. Y recordó la necesidad de que su colectivo disponga de suministro de agua, para limpiar a tiempo y tener «perfectas» todas las plataformas a las que luego se subirán niños, jóvenes y adultos.
Entre tanto, los festeros han empezado ya el montaje del campamento. En concreto, lo han hecho los púnicos Caballeros e Isis de Carthago y Guerreros de Uxama. Las labores en Benipila continuarán el próximo fin de semana.