La seguridad prende la mecha de la tradición pirotécnica en los pueblos
La seguridad prende la mecha de la tradición pirotécnica en los pueblos
Desde junio es obligatorio tener un curso de formación para el lanzamiento de cohetes
Las fiestas patronales de los pueblos desde hace siglos han contado con el estruendo de cohetes y petardos para anunciar el inicio de los actos religiosos, ya sea la misa en honor al santo patrón de la localidad o los típicos cohetes de lanzadera que marcan la marcha de la procesión, provocando que la mayor parte de los vecinos alguna vez han participado en el espectáculo de la pirotecnia.
Sin embargo esta tradición puede estar a punto de desaparecer, y es que, desde mayo las celebraciones religiosas y fiestas de los pueblos están bajo un nuevo decreto que regula el uso de cohetes. En la normativa publicada en el boletín oficial de la Junta de Castilla y León se reconoce el papel destacado de la pirotecnia en algunos festejos populares así como en celebraciones religiosas, especialmente en las procesiones, pero para garantizar la seguridad del acto se exige que estos artefactos pirotécnicos sean manipulados por personas formadas previamente siguiendo los criterios fijados en la normativa.
El curso teórico-práctico debe ser impartido por empresas externas y debe tener al menos una duración de cinco horas, a su finalización debe hacerse una evaluación la cual debe aprobarse para obtener el certificado. Posteriormente las personas recibirán un carnet donde se reconoce su capacidad para la actividad pirotécnica.
Desde la delegación territorial informan que en lo que va de año, en la provincia 38 ayuntamientos han solicitado la autorización para poder lanzar distintos tipos de artefactos, la solicitud debe estar acompañada tres tipos distintos de documentación entra los que se encuentran: de un seguro de responsabilidad civil por parte del Ayuntamiento, así como un informe elaborado por la Junta sobre la idoneidad de tirar fuegos y finalmente la subdelegación debe aprobar el informe acerca de los explosivos utilizados así como adjuntar el carnet de formación del grupo experto que va a proceder al lanzamiento de los cohetes.
En total de las 38 solicitudes 27 se autorizaron y diez aun siguen en tramitación para este mes de Agosto, solamente una de las solicitudes fue rechaza al incumplir los requisitos.
En los ayuntamientos de la provincia la noticia ha levantado diversas opiniones, muchos alcaldes se han manifestado a favor de la nueva norma al considerar que puede ser una medida eficaz para prevenir los incendios, y algunos de ellos como el alcalde de Castrocontrigo llegan a afirmar que las fiestas pueden celebrarse con normalidad sin la presencia de los cohetes.
Sin embargo, en las zonas donde el riesgo de incendios es menor, los alcaldes se muestran a favor de mantener la tradición y no creen necesaria la formación de los vecinos para lanzar los cohetes, en esta linea se encuentra el alcalde de Valderrueda, Esteban González, quien cree que solo es necesaria la coherencia para que no se produzcan accidentes.
Por otra parte en algunas localidades hace varios años que renunciaron a la tradición al ver como se complicaba más y más la normativa, como es el caso de Boñar donde sus actos llevan ya tres años sin cohetes.
A FAVOR
Muchos de los alcaldes a lo largo de toda la provincia han dado su visto bueno a esta normativa, al considerar que la manipulación de cohetes y petardos conlleva cierto peligro no solo para el usuario encargado de dicha tarea sino para el resto de presentes, además de poder causar incendios forestales.
Es el caso de Olivio Campo, alcalde de Castrocontrigo quien señala que «En los meses de verano, cuando el riesgo de incendio es tan alto no deberían lanzarse petardos, las fiestas pueden darse perfectamente sin petardos» y se remite a los dos grandes incendios que ha sufrido su localidad en las dos últimas décadas «es mejor prevenir que lamentar incendios» apunta.
Asimismo el Ayuntamiento de Cea ya cuenta con una persona certificada que cuenta con la formación necesaria para el lanzamiento de cohetes ya que se muestran a favor de la normativa porque creen que es necesario crear una mayor conciencia sobre los peligros que se pueden derivar de esta actividad.
Respecto al curso, el alcalde de Villamejil, Luis Alfonso Alvárez, asevera que «esa formación sí será buena para que las medidas de seguridad a la hora de lanzar los cohetes sean mayores». Una visión que comparte otro regidor de las tierras bañezanas como es el alcalde de Alija del Infantado, Abilio Panero, que apunta que «en nuestro municipio somos mucho de tirar voladores y convendría que los encargados de hacerlo tuvieran mayor formación para evitar cualquier accidente por lo que creo que podría ser positivo».
El pedáneo de Caboalles de Arriba, Jesus Rodriguez, está de acuerdo en tomar precauciones, pero también señala que hay que tener en cuenta la pequeña cantidad de cohetes que se lanzan en los pueblos en fiestas. El pedáneo denuncia que no hay suficiente información sobre el curso formativo, ya que la recogida en la normativa no está muy detallada y le gustaría conocer más aspectos, como quién lo puede sacar o que requisitos son necesarios. Además destaca se debería tener en cuenta qué pasaría si la persona formada no está el día que se vayan a lanzar los cohetes.
Sin embargo esta tradición puede estar a punto de desaparecer, y es que, desde mayo las celebraciones religiosas y fiestas de los pueblos están bajo un nuevo decreto que regula el uso de cohetes. En la normativa publicada en el boletín oficial de la Junta de Castilla y León se reconoce el papel destacado de la pirotecnia en algunos festejos populares así como en celebraciones religiosas, especialmente en las procesiones, pero para garantizar la seguridad del acto se exige que estos artefactos pirotécnicos sean manipulados por personas formadas previamente siguiendo los criterios fijados en la normativa.
El curso teórico-práctico debe ser impartido por empresas externas y debe tener al menos una duración de cinco horas, a su finalización debe hacerse una evaluación la cual debe aprobarse para obtener el certificado. Posteriormente las personas recibirán un carnet donde se reconoce su capacidad para la actividad pirotécnica.
Desde la delegación territorial informan que en lo que va de año, en la provincia 38 ayuntamientos han solicitado la autorización para poder lanzar distintos tipos de artefactos, la solicitud debe estar acompañada tres tipos distintos de documentación entra los que se encuentran: de un seguro de responsabilidad civil por parte del Ayuntamiento, así como un informe elaborado por la Junta sobre la idoneidad de tirar fuegos y finalmente la subdelegación debe aprobar el informe acerca de los explosivos utilizados así como adjuntar el carnet de formación del grupo experto que va a proceder al lanzamiento de los cohetes.
En total de las 38 solicitudes 27 se autorizaron y diez aun siguen en tramitación para este mes de Agosto, solamente una de las solicitudes fue rechaza al incumplir los requisitos.
En los ayuntamientos de la provincia la noticia ha levantado diversas opiniones, muchos alcaldes se han manifestado a favor de la nueva norma al considerar que puede ser una medida eficaz para prevenir los incendios, y algunos de ellos como el alcalde de Castrocontrigo llegan a afirmar que las fiestas pueden celebrarse con normalidad sin la presencia de los cohetes.
Sin embargo, en las zonas donde el riesgo de incendios es menor, los alcaldes se muestran a favor de mantener la tradición y no creen necesaria la formación de los vecinos para lanzar los cohetes, en esta linea se encuentra el alcalde de Valderrueda, Esteban González, quien cree que solo es necesaria la coherencia para que no se produzcan accidentes.
Por otra parte en algunas localidades hace varios años que renunciaron a la tradición al ver como se complicaba más y más la normativa, como es el caso de Boñar donde sus actos llevan ya tres años sin cohetes.
A FAVOR
Muchos de los alcaldes a lo largo de toda la provincia han dado su visto bueno a esta normativa, al considerar que la manipulación de cohetes y petardos conlleva cierto peligro no solo para el usuario encargado de dicha tarea sino para el resto de presentes, además de poder causar incendios forestales.
Es el caso de Olivio Campo, alcalde de Castrocontrigo quien señala que «En los meses de verano, cuando el riesgo de incendio es tan alto no deberían lanzarse petardos, las fiestas pueden darse perfectamente sin petardos» y se remite a los dos grandes incendios que ha sufrido su localidad en las dos últimas décadas «es mejor prevenir que lamentar incendios» apunta.
Asimismo el Ayuntamiento de Cea ya cuenta con una persona certificada que cuenta con la formación necesaria para el lanzamiento de cohetes ya que se muestran a favor de la normativa porque creen que es necesario crear una mayor conciencia sobre los peligros que se pueden derivar de esta actividad.
Respecto al curso, el alcalde de Villamejil, Luis Alfonso Alvárez, asevera que «esa formación sí será buena para que las medidas de seguridad a la hora de lanzar los cohetes sean mayores». Una visión que comparte otro regidor de las tierras bañezanas como es el alcalde de Alija del Infantado, Abilio Panero, que apunta que «en nuestro municipio somos mucho de tirar voladores y convendría que los encargados de hacerlo tuvieran mayor formación para evitar cualquier accidente por lo que creo que podría ser positivo».
El pedáneo de Caboalles de Arriba, Jesus Rodriguez, está de acuerdo en tomar precauciones, pero también señala que hay que tener en cuenta la pequeña cantidad de cohetes que se lanzan en los pueblos en fiestas. El pedáneo denuncia que no hay suficiente información sobre el curso formativo, ya que la recogida en la normativa no está muy detallada y le gustaría conocer más aspectos, como quién lo puede sacar o que requisitos son necesarios. Además destaca se debería tener en cuenta qué pasaría si la persona formada no está el día que se vayan a lanzar los cohetes.